Uno de los principios básicos de la osteopatía es que cada tejido del cuerpo tiene cierta destreza (o movilidad) y el tejido la necesita para poder funcionar de la mejor manera. No es difícil imaginar las consecuencias de una movilidad reducida en una o más articulaciones, ya que su caballo quedará rígido o cojo. Es más difícil imaginar cuáles son las consecuencias de la reducción del movimiento en los intestinos.
Intestinos en movimiento
No sólo los tejidos implicados en la locomoción necesitan poder moverse libremente, sino que esto también se aplica a todos los órganos presentes en el cuerpo. La reducción o pérdida del movimiento afectará la capacidad de ese órgano para funcionar como se supone que debe hacerlo. Donde usamos la palabra “movilidad” para el movimiento perteneciente a la locomoción, usamos la palabra “motilidad” para el movimiento perteneciente a los órganos.
Respiración
Existen diferentes orígenes del movimiento de órganos. La respiración es una de ellas. Cada vez que el diafragma respiratorio se contrae para inhalar, la cavidad torácica aumenta. Al mismo tiempo la cavidad abdominal se reduce. Esta disminución de espacio tiene consecuencias para los órganos de la cavidad abdominal. La misma cantidad de órganos en un espacio más pequeño significa que los órganos se comprimen. Al mismo tiempo, cambian un poco de posición para adaptarse al espacio. El cambio de posición es posible gracias a la capa de fascia que encierra los órganos. La fascia de un órgano puede deslizarse en relación con la fascia del órgano adyacente.
Movimiento inherente
La segunda razón de la motilidad de los órganos proviene del interior del órgano. Dependiendo de la función del órgano, se requiere un determinado movimiento. Por ejemplo: para procesar los alimentos, los intestinos tienen que mezclar y amasar el puré de alimentos. Al mismo tiempo hay que hacer avanzar el puré de alimentos. Entonces, los intestinos realizan tanto un movimiento de amasado como de propulsión.
Disminución de la motilidad
Una menor motilidad de los intestinos significa menos amasado del puré de alimentos, lo que significa que los alimentos no están tan bien preparados para que el cuerpo extraiga los nutrientes. Como ya puedes imaginar, la disminución de la motilidad puede tener un gran impacto en la condición física del caballo.
Estrés
Existen múltiples razones por las que los órganos pierden algo de motilidad. El estrés es un factor importante, así como las enfermedades y los traumas. Además de todo lo que sucede a nivel bioquímico cuando un caballo sufre estrés, el estrés también afecta la respiración del caballo. La tensión alrededor del diafragma respiratorio aumentará durante momentos de estrés, disminuyendo así su rango de movimiento. Como consecuencia, los órganos abdominales no se mueven como deberían. Además, la tensión en el diafragma respiratorio afecta la entrada del estómago que se encuentra en el diafragma. La tensión del diafragma disminuye el tamaño de la entrada del estómago. Como consecuencia, la mayoría de los caballos muestran una disminución del apetito, lo que aumenta las posibilidades de desarrollar úlceras de estómago.
Enfermedad
El ejemplo más claro de una enfermedad causada por una disminución de la motilidad de los intestinos son los cólicos. El dolor, los calambres y/o el estreñimiento tienen una enorme influencia en la motilidad y viceversa. Muy a menudo, el caballo no se recupera al 100% después de sufrir un cólico. En un gran porcentaje de los casos, la causa es la disminución de la motilidad.
Trauma
En una situación normal, los órganos pueden deslizarse entre sí debido a la capa de fascia que los rodea. En el caso del tejido cicatricial, este movimiento de deslizamiento se complica. Y aunque no puedes eliminar la cicatriz, puedes trabajar en la tensión que la rodea, lo que libera la tensión que puede generar una cicatriz.
Osteopatía
Un osteópata está capacitado para sentir el movimiento en los diferentes tejidos del cuerpo. Cuando el osteópata encuentra una disminución del movimiento, puede utilizar una amplia gama de técnicas para mejorar el movimiento. Las técnicas utilizadas son en su mayoría las llamadas técnicas de “lectura fascial”. En esas técnicas, el osteópata sigue el movimiento inherente y con invitaciones educadas estimula al tejido a ampliar el movimiento. No es necesario utilizar la fuerza para trabajar con la motilidad de los órganos. Los intestinos de un caballo pesan aproximadamente 450 libras, por lo que no sirve de nada tirar y empujar para crear movimiento…
Conclusión
Ten en cuenta que los órganos deben poder moverse libremente. Siempre que “algo” le suceda al caballo con respecto a sus intestinos y no parezca recuperarse al 100% después, considera pedirle a un osteópata que trabaje con el caballo. Obtener la libre circulación de los intestinos puede aportar grandes mejoras al bienestar general del caballo.
Fotografía destacada cortesía de Shelley Paulson.
Después de graduarme como fisioterapeuta, continué mis estudios en Bélgica para convertirme en osteópata equino y canino. Dirijo mi propia práctica desde 2005, con mi sede en los Países Bajos.
El trabajo me llevó a viajar. Trabajé con caballos islandeses en Finlandia, monté a caballo en Shenzhen, China, y trabajé con caballos de salto y doma en Estados Unidos.
“Menos es más”, es mi lema. No me verá tirando y empujando caballos durante el tratamiento; Siempre buscaré la técnica más suave posible.
Difundir conocimientos y así aumentar la calidad de vida de los caballos son aspectos importantes para mí, de ahí mi deseo de escribir. He escrito varios libros (sobre perros) y soy escritora habitual de revistas y sitios web.
*Traducido por Carmen Elisa Franco
After graduating as a physical therapist, I continued my studies in Belgium to become an equine and canine osteopath. I’ve run my own practice since 2005, with my homebase in the Netherlands.
Work led me to travel. I worked with Icelandic horses in Finland, rode horses in Shenzhen, China, and worked with show jumping and dressage horses in the USA.
“Less is more”, is my credo. You won’t see me pulling and pushing on horses during treatment; I will always search for the gentlest technique possible.
Spreading knowledge and thereby increasing the quality of the life of horses are important aspects for me, hence my drive to write. I have written several (dog) books and am a regular writer for magazines and websites.